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A pesar de pasar por un buen momento, la empresa aragonesa debe afrontar nuevos retos para asegurar su competitividad en el futuro implantando estrategias y acciones que consoliden su actividad y refuercen la internacionalización. Adaptar sus plantillas a estos intereses y a las nuevas necesidades tecnológicas son otros retos inmediatos para uno de los sectores con mayor crecimiento a nivel nacional.

Consolidación de la industria manufacturera

Todos los datos apuntan a que 2018 será un año determinante para la empresa aragonesa. Así lo percibimos los profesionales que, como Grup Montaner, trabajamos directamente y a diario con empresas regionales, y así lo avalan también los datos económicos: Aragón cerró 2017 con datos alentadores en términos relativos de crecimiento, con un aumento del PIB del 3,6%, medio punto más que la media nacional (3,1%) y nueve décimas por encima del incremento registrado en 2016 (2,7%), según los datos de Contabilidad Regional publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, la tasa de empleo creció en el ejercicio 2017 (un 3,2% más que el año anterior según datos de la EPA), lo que define el buen momento de salud de la empresa aragonesa.

Por otra parte, se espera que durante 2018 la empresa aragonesa consolide su liderazgo en la industria manufacturera, que ya en 2017 lideró el crecimiento económico aragonés con una tasa interanual del 6,3% e influyendo muy positivamente en otros sectores productivos. También el sector de la distribución puede convertirse en un referente, tanto a nivel regional como nacional, debido a la posición geográfica de esta Comunidad Autónoma.

Pero pese a este estado de buena salud, la empresa aragonesa se enfrenta a importantes retos para mantener esta posición, entre ellos la adaptación tecnológica o el relevo generacional, dos elementos fundamentales en la internacionalización.

Los 5 retos inmediatos de la empresa aragonesa

El entramado empresarial aragonés debe ser capaz de implantar nuevas estrategias y acciones que sirvan para consolidar los modelos empresariales del futuro. Algunos de los principales retos y demandas a los que se enfrenta la empresa aragonesa son:

1. Prepararse para la internacionalización

La internacionalización es clave para promover el impulso de la demanda externa. Como bien sabemos, los planes de internacionalización tienen ritmos y características diferentes en cada organización. Sin embargo, para salir “victoriosas”, todas las compañías deben partir de un exhaustivo estudio de mercado que les permita dar pasos firmes en el extranjero. En este sentido, la empresa aragonesa debe realizar acciones alienadas con sus valores, incorporando o desarrollando de manera interna perfiles profesionales y técnicos con clara visión y vocación internacional.

2. Transformar la industria manufacturera

Otra de las principales oportunidades para la empresa aragonesa para competir en el mercado internacional es la transformación de la industria de la manufactura. Para conseguirlo, será necesaria la implementación de metodologías Lean, la inversión en industria 4.0, el I+D+i y la aplicación de la tecnología en los procesos productivos. Un “challenge” que adquiere mayor relevancia en Aragón, una comunidad muy próspera a nivel industrial.

3. Incorporar expertos en digitalización

Según un estudio presentado en el Foro de Davos, el 50% de los CEOs a nivel mundial considera que es muy difícil captar perfiles expertos en digitalización. Es por eso que la empresa aragonesa debe realizar la especialización de internamente, creando y desarrollando planes de carrera profesional adaptados a las nuevas necesidades tecnológicas y de transformación digital de cada sector.

4. Detectar posibles sinergias y alianzas para captar nuevas oportunidades

El desarrollo de la economía colaborativa mediante el refuerzo de los clústers es otro de los retos imperativos que debe afrontar la empresa aragonesa. El objetivo es sencillo: se trata de “mover” posturas rígidas para detectar nuevas oportunidades y generar nuevas alianzas beneficiosas.

5. Facilitar el cambio generacional

La empresa familiar, como transmisora de valores y generadora de empleo, tiene un papel trascendental dentro de la industria de Aragón. Sin embargo, según un estudio liderado por KPMG, IESE y Reynold, solo un 44% de las empresas llegan a la segunda generación, un 7% a la tercera y un escueto 3% a la cuarta. Desde este punto de vista, el gran reto de la empresa aragonesa familiar es afianzar el relevo generacional e incrementar la profesionalización y especialización que propicien su salto cualitativo. Este cambio generacional afecta a las herramientas de la empresa, pero también a su estructura, protagonistas, visión, misión y valores. Un cambio que exige la cooperación intergeneracional y que, si se hace correctamente, se convertirá en una gran ventaja competitiva para cualquier organización.

En líneas generales, la empresa aragonesa vive buenos momentos. Sin embargo, y como acabamos de ver, abordar algunos cambios a corto plazo es imprescindible para mantener esta buena salud en el futuro. Con 27 oficinas y un equipo de 3.500 trabajadores especializados de forma directa e indirecta, Grup Montaner tiene presencia prácticamente en toda España y Aragón no es una excepción. Queremos ayudar a tu empresa a afrontar el presente y el futuro con paso firme. Consulta todo lo que Grup Montaner puede hacer por tu empresa.