RevistaGrupMontaner2
Ya sabemos que los intereses están por las nubes, pero ¿cómo cuida Banc Sabadell lo
s intereses de sus empleados?

Yo, como empleada, creo que lo principal es que en Banc Sabadell existen oportunidades para desarrollar tu carrera profesional.
Es una empresa fuerte y en crecimiento, así que también es una buena opción para crecer profesionalmente.

Entonces el objetivo del Banc Sabadell con sus empleados es atender a sus inquietudes y expectativas profesionales;
¿qué papel desempeña la formación en la consecución de esos objetivos?
La formación debe facilitar ese crecimiento profesional del que hablaba. Intentamos que las personas tengan a su
disposición opciones de formación adaptadas a sus intereses. Disponemos de diferentes planes de formación: transversales, que se dirigen a todos los trabajadores, y focalizados, dirigidos a colectivos determinados. Por ejemplo, los transversales forman sobre nuevas operativas informáticas. Los focalizados se adaptan a cada persona, a sus intereses, su potencial, su cargo… son planes a medida. La mayoría de los planes de formación que llevamos a cabo son personalizad
os y adaptados a nuestro negocio y cultura de empresa.
¿Hay personas o departamentos que se beneficien más que otros de los planes de formación?
Depende de las necesidades y de la estrategia del banco en cada período. A veces, hay sectores del banco que reciben más formación porque se quiere desarrollar una vía de negocio nueva, pero, en general, no hay ningún departamento destacado. Lo que es cierto es que hay personas que tienen más inquietudes profesionales, o que las manifiestan más. En general, la gente joven solicita más formación, tiene menos experiencia y la necesita más.
¿Cuál es el perfil de los empleados de Banc Sabadell?
Tenemos una media de edad de unos 40 años; más o menos la mitad de la plantilla son hombres, y la mitad, mujeres.
También está en alrededor del 50% el porcentaje de personas que tiene estudios superiores. valores, destacan la profesionalidad, el hecho de que generan la confianza de los clientes, tienen un compromiso personal y responsabilidad e ilusión por un proyecto, que acaba siendo un proyecto de todos.

¿Y cuántos empleados acceden anualmente a cursos de formación?
En el último período, fueron cerca de 9.000 las personas que hicieron algún tipo de formación de entre un total de casi 10.000 empleados. Es decir, el 90% de la plantilla.
¿Y todos los hacen de forma voluntaria?
No todos los cursos son voluntarios: hay cursos que son de obligado cumplimiento por ley, como es el caso de los de prevención de riesgos laborales o temas legales sobre banca (de prevención de blanqueo de capital, por ejemplo). Pero el resto son voluntarios. Es la única manera  de que la formación sea efectiva: que la persona tenga una motivación personal.
¿Qué métodos de formación utiliza Banc Sabadell?
Ofrecemos formación presencial, con monitores. También tenemos una plataforma de e-learning y, por último, realizamos cursos mixtos. La duración es variable: desde cursos de 2 horas hasta programas formativos de 400 horas.
¿Por qué recurrís al outsourcing en formación?
Tenemos una plantilla de cerca de 10.000 personas y en el departamento de formación somos 10. Nuestra función es desarrollar la estrategia de formación: detectar necesidades, diseñar los planes, realizar el seguimiento, etc. Evidentemente, necesitamos ayuda externa para impartir la formación. Trabajamos con proveedores a los que pedimos, sobre todo, flexibilidad, que se adapten al negocio de Banc Sabadell y que estén abiertos a la mejora. Cuando hacemos un curso por primera vez, esperamos que el diseño sea adaptable para siguientes ocasiones. Precisamente, el banco está en cambio continuo y debe ir acompañado de proveedores que colaboren en esa evolución.
¿Qué aspectos valora más positivamente de Grup Montaner en este sentido?
Yo asistí a uno de sus cursos y lo que me gustó mucho fue la dinámica que se creó en él, el hecho de que fuera muy interactivo y la gente pudiera compartir experiencias del día a día. Me interesó la voluntad de enseñar a los alumnos que todo lo que aprenden es aplicable una vez que llegan a su mesa de despacho.
¿Cómo han afectado los últimos cambios en Banc Sabadell a la formación?
Han derivado hacia una gestión de la formación mucho más generalista, más dinámica, que pasa por trabajar con empresas externas buscando adaptarnos al cambio. Comenzamos a hablar de autodesarrollo cuando las personas ven el banco como una vía para desarrollarse profesionalmente y demandan la formación que necesitan para ello. Nos estamos centrando
en planes más generales, más vinculados a la gestión de la carrera profesional.
Y más allá de Banc Sabadell, ¿qué opinas de la situación de la formación en las empresas de nuestro país?
Hace poco leí un artículo que aseguraba que las empresas españolas eran de las que menos invertían en formación respecto al resto de Europa. Por debajo creo que sólo estaban Grecia y Portugal. Todavía se da poca importancia a la formación, se la ve más
como un coste que como una inversión. Pero poco a poco las empresas están viendo la importancia de invertir en formación tanto para conseguir objetivos específicos como una herramienta más que apoya la retención del talento. Si queremos diferenciarnos de la com-
petencia, tiene que ser a través de las personas. Que los empleados son el principal activo de una empresa no es sólo una frase bonita, es una realidad